Por Alex Steiner
06 de octubre 2011
Traducción de Antonio Baluarte
En el centro de Manhattan está Wall Street , preñado de la historia de los Estados Unidos. Aunque hoy en día Wall Street se conoce como el corazón financiero del capitalismo estadounidense, comenzó como una muralla, al límite norte del asentamiento original holandés de Nueva Amsterdam. Los jóvenes manifestantes que se encuentran ahora en la tercera semana de su ocupación de Zuccotti Park eligieron su campamento también. Apenas a tres cuadras de sus tiendas de campaña se encuentra la razón de ese símbolo del capitalismo americano, el New York Stock Exchange.
En el centro de Manhattan está Wall Street , preñado de la historia de los Estados Unidos. Aunque hoy en día Wall Street se conoce como el corazón financiero del capitalismo estadounidense, comenzó como una muralla, al límite norte del asentamiento original holandés de Nueva Amsterdam. Los jóvenes manifestantes que se encuentran ahora en la tercera semana de su ocupación de Zuccotti Park eligieron su campamento también. Apenas a tres cuadras de sus tiendas de campaña se encuentra la razón de ese símbolo del capitalismo americano, el New York Stock Exchange.
En diagonal, a través de la calle de las columnas de mármol de la Bolsa de Valores,hay una gigantesca estatua del fundador de la república estadounidense, George Washington. Él está de pie en las escalinatas del Federal Hall, el lugar donde fue juramentado como el primer Presidente de la República. Otro padre fundador está enterrado aún más cerca del sitio del campamento de los manifestantes - Alexander Hamilton, el arquitecto de los Estados Unidos , del First National Bank, está descansando en el cementerio de Trinity Church.
Otro bloque más o menos por la calle y la vuelta de la esquina de la Bolsa de Valores se encuentra levantadas las gigantescas murallas fortificadas de la Reserva Federal de Nueva York, sede de lo que es quizás el mayor tesoro de lingotes de oro en el mundo, por un valor aproximadamente de 7.000 toneladas. Más que esto, aquí es donde la mayor parte de la política económica de los Estados Unidos se lleva a cabo, a partir de la fijación de los tipos de cambio de monedas extranjeras a la transferencia de miles de millones de dólares entre los bancos sobre una base diaria. El edificio también organizó, junto con el Departamento del Tesoro en Washington, algunos de los encuentros que reunió a los jefes de la Reserva Federal y el Tesoro con el CEO de los mayores bancos del país para elaborar los términos de lo que eventualmente se convirtió en el plan de rescate del TARP de los bancos tras la crisis provocada por el colapso de Lehman Brothers en 2008.
Esto nos lleva a una consideración de lo que está pasando en el Zuccotti Park. Varios miles de manifestantes están diciendo que han tenido suficiente. Están cansados de ver a miles de millones de dólares que se utiliza para rescatar a los bancos cuyas prácticas fraudulentas en los años anteriores los dejó en posesión de bienes masivos, cuyo valor bajó repentinamente a cero. Al otro lado del rescate bancario realizado tanto por las administraciones de Bush y Obama, ha sido el empobrecimiento de decenas de millones de personas, especialmente de los jóvenes. Mi impresión, como resultado de hablar con algunos de los manifestantes y la audiencia que entrevisté es que la gran mayoría de los ocupantes de Wall Street no ve ningún futuro para sí mismos en virtud de este sistema económico conocido como capitalismo.
También me impresionó el espíritu de la inventiva y la lucha de estos jóvenes. Ellos, frente a grandes dificultades, han sido capaces de mantener una ciudad de carpas en el centro de Manhattan, en un inhóspito "parque" que es en realidad una plaza de concreto con poco o nada de servicios, que no sean la hierba y los árboles, y no hay baños públicos o fuentes de agua. Lo que sí hay son algunas mesas y sillas que normalmente son ocupadas por los trabajadores de oficina sorbiendo su café de la mañana, los jugadores de ajedrez o sitios de tomar de los magnates de Wall Street para los cuartos. De alguna manera este grupo ha logrado alimentarse a sí mismo, con la ayuda de los vecinos que han donado alimentos.
Esto nos lleva a una consideración de lo que está pasando en el Zuccotti Park. Varios miles de manifestantes están diciendo que han tenido suficiente. Están cansados de ver a miles de millones de dólares que se utiliza para rescatar a los bancos cuyas prácticas fraudulentas en los años anteriores los dejó en posesión de bienes masivos, cuyo valor bajó repentinamente a cero. Al otro lado del rescate bancario realizado tanto por las administraciones de Bush y Obama, ha sido el empobrecimiento de decenas de millones de personas, especialmente de los jóvenes. Mi impresión, como resultado de hablar con algunos de los manifestantes y la audiencia que entrevisté es que la gran mayoría de los ocupantes de Wall Street no ve ningún futuro para sí mismos en virtud de este sistema económico conocido como capitalismo.
También me impresionó el espíritu de la inventiva y la lucha de estos jóvenes. Ellos, frente a grandes dificultades, han sido capaces de mantener una ciudad de carpas en el centro de Manhattan, en un inhóspito "parque" que es en realidad una plaza de concreto con poco o nada de servicios, que no sean la hierba y los árboles, y no hay baños públicos o fuentes de agua. Lo que sí hay son algunas mesas y sillas que normalmente son ocupadas por los trabajadores de oficina sorbiendo su café de la mañana, los jugadores de ajedrez o sitios de tomar de los magnates de Wall Street para los cuartos. De alguna manera este grupo ha logrado alimentarse a sí mismo, con la ayuda de los vecinos que han donado alimentos.
Se las arreglaron para mantener seca la cara en las implacables lluvias de otoño en Nueva York, gracias a unas lonas que ellos han secuestrado. Sin electricidad, han conseguido crear un centro de comunicaciones, alimentado por un generador portátil, donde varias personas están ocupadas en la cima dándolo vuelta durante todo el día, llueva o haga sol, esparciendo su mensaje a los sitios de redes sociales en todo el mundo.
Se han creado comités encargados de confección de carteles, impresión de una versión satírica de The Wall Street Journal, y la organización de las marchas y actos de desobediencia civil. Hay un ruido constante de tambores y otros instrumentos en una esquina donde puedes encontrar juerguistas traspasado por los sonidos rítmicos. Hay incluso una biblioteca libre repleta de libros donados, disponible para quien quiera leerlos. Lo más destacado de cada noche es lo que ellos llaman una "Asamblea General", un experimento de participación democrática donde todo el mundo que quiera puede hablar y contribuir a la discusión. A las decisiones se llega a través de un torturante proceso de consenso.
La policía ha prohibido el uso de megáfonos o equipos de audio por lo que es extremadamente difícil de mantener reuniones al aire libre. Sin embargo, los manifestantes han vuelto a encontrar una ingeniosa manera de sortear este obstáculo legal para la democracia participativa. Una persona habla, la que es a su vez, estrechamente rodeada de cientos de facilitadores. Luego, estos animadores hacen eco con su voz, de las palabras del hablante, de manera que la multitud que los rodea puede conocer de la demanda. El procedimiento me recuerda a la brillante película de Truffaut, Fahrenheit 451, (basada en una historia igual de brillante, de Ray Bradbury), donde en un futuro cuando la lectura o la impresión de los libros están prohibidos, un grupo de personas que se dedican a la preservación de la literatura mediante memorizar libros enteros que ya no pueden ser impresos o a los cuales ya no se puede acceder físicamente. Se han convertido en libros de vida así como a los facilitadores en la Ocupada Wall Street se han convertido en megáfonos vivientes.
La política de los manifestantes, en la medida en que la articulan, es ciertamente ingenua y contradictoria. He visto pronunciamientos que a la vez que sonaban muy radicales, llamando a poner fin a la plutocracia que maneja este país, junto con otros signos ("Emitir la ley para trabajos ya") que indica que la luna de miel con Obama en que muchos jóvenes en 2008, aunque mal herida, no puede ser completamente terminada para algunos. Los manifestantes OWS han hecho hincapié en que desprecian el proceso político y han evitado deliberadamente la presentación de una serie de demandas. Lo que indica claramente han sido inspirados por el ejemplo de las manifestaciones masivas en la plaza Tahrir de El Cairo a principios de este año y la plaza Syntagma, en Atenas. Ellos consideran su acción como la chispa de la Revolución Americana.
Esta no es una revolución pero es imposible predecir cómo este movimiento va a mostrar sus efectos. Hay indicios de que los manifestantes han aprovechado una vena de la ira contra las injusticias de la vida en la América del siglo XXI que ha estado hirviendo a fuego lento durante años. Sus acciones ya han inspirado a otras protestas en otras ciudades. Asistimos una vista previa de esta acción en los plantones en Madison, Wisconsin, a principios de este año. Desafortunadamente ese movimiento fue desviado por la burocracia sindical y el Partido Demócrata que incitaron abandonar sus protestas y poner su energía en una campaña de más valor. A los manifestantes OWS no será tan fácil desviarlos. Sin embargo, su rechazo de la acción política es a la vez su fuerza y su debilidad.
Lo que se considera la política normal en este país, el apoyo a uno u otro de los dos partidos burgueses, sin duda merece una dosis fuerte de desprecio. Pero que por sí misma hace poco para lograr el tipo de sociedad más justa que los manifestantes imaginan. De hecho, puede servir como una invitación para los demagogos y oportunistas de varias clases para venir y llenar el vacío. Y aunque he visto pocos indicios de la confluencia habitual de los grupos de la izquierda en el campamento, su presencia se hincha cada vez que hay una marcha de protesta o alguna otra acción. El partido neo-estalinista de los Trabajadores del Mundo se ha manifestado al igual que la Organización Socialista Internacional (ISO). Hubo mucho entusiasmo hoy en la anticipación de los representantes de los sindicatos a venir mañana para mostrar su apoyo.
La policía ha prohibido el uso de megáfonos o equipos de audio por lo que es extremadamente difícil de mantener reuniones al aire libre. Sin embargo, los manifestantes han vuelto a encontrar una ingeniosa manera de sortear este obstáculo legal para la democracia participativa. Una persona habla, la que es a su vez, estrechamente rodeada de cientos de facilitadores. Luego, estos animadores hacen eco con su voz, de las palabras del hablante, de manera que la multitud que los rodea puede conocer de la demanda. El procedimiento me recuerda a la brillante película de Truffaut, Fahrenheit 451, (basada en una historia igual de brillante, de Ray Bradbury), donde en un futuro cuando la lectura o la impresión de los libros están prohibidos, un grupo de personas que se dedican a la preservación de la literatura mediante memorizar libros enteros que ya no pueden ser impresos o a los cuales ya no se puede acceder físicamente. Se han convertido en libros de vida así como a los facilitadores en la Ocupada Wall Street se han convertido en megáfonos vivientes.
La política de los manifestantes, en la medida en que la articulan, es ciertamente ingenua y contradictoria. He visto pronunciamientos que a la vez que sonaban muy radicales, llamando a poner fin a la plutocracia que maneja este país, junto con otros signos ("Emitir la ley para trabajos ya") que indica que la luna de miel con Obama en que muchos jóvenes en 2008, aunque mal herida, no puede ser completamente terminada para algunos. Los manifestantes OWS han hecho hincapié en que desprecian el proceso político y han evitado deliberadamente la presentación de una serie de demandas. Lo que indica claramente han sido inspirados por el ejemplo de las manifestaciones masivas en la plaza Tahrir de El Cairo a principios de este año y la plaza Syntagma, en Atenas. Ellos consideran su acción como la chispa de la Revolución Americana.
Esta no es una revolución pero es imposible predecir cómo este movimiento va a mostrar sus efectos. Hay indicios de que los manifestantes han aprovechado una vena de la ira contra las injusticias de la vida en la América del siglo XXI que ha estado hirviendo a fuego lento durante años. Sus acciones ya han inspirado a otras protestas en otras ciudades. Asistimos una vista previa de esta acción en los plantones en Madison, Wisconsin, a principios de este año. Desafortunadamente ese movimiento fue desviado por la burocracia sindical y el Partido Demócrata que incitaron abandonar sus protestas y poner su energía en una campaña de más valor. A los manifestantes OWS no será tan fácil desviarlos. Sin embargo, su rechazo de la acción política es a la vez su fuerza y su debilidad.
Lo que se considera la política normal en este país, el apoyo a uno u otro de los dos partidos burgueses, sin duda merece una dosis fuerte de desprecio. Pero que por sí misma hace poco para lograr el tipo de sociedad más justa que los manifestantes imaginan. De hecho, puede servir como una invitación para los demagogos y oportunistas de varias clases para venir y llenar el vacío. Y aunque he visto pocos indicios de la confluencia habitual de los grupos de la izquierda en el campamento, su presencia se hincha cada vez que hay una marcha de protesta o alguna otra acción. El partido neo-estalinista de los Trabajadores del Mundo se ha manifestado al igual que la Organización Socialista Internacional (ISO). Hubo mucho entusiasmo hoy en la anticipación de los representantes de los sindicatos a venir mañana para mostrar su apoyo.
Por supuesto, los publicistas de la burocracia sindical que se unirán a la marcha de mañana van a estar aquí para tratar de canalizar este movimiento hacia atrás en la seguridad de convertir las protestas en inofensivas y por el apoyo al Partido Demócrata. La ingenuidad evidenciada en los manifestantes, que podrían esperar otra cosa de la burocracia sindical, no es sorprendente. Ellos vienen de una generación casi totalmente desprovista de cualquier cultura o de educación política histórica.
Los que han entrado en contacto con la política, ha sido en gran medida a los movimientos de protesta de la última década, el movimiento anti-guerra, el movimiento de justicia global, etc. han recogido una educación en gran medida gracias a los sitios de redes sociales en Internet y al ejemplo de Egipto y Grecia. Independientemente de sus orígenes, ya sea de la clase trabajadora o clase media, han llegado a la misma coyuntura en este tercer año de la mayor crisis económica del sistema capitalista desde la Gran Depresión. En su mayoría son desempleados o subempleados, y no ven un futuro para sí mismos en una sociedad que los ha bombardeado desde el nacimiento con imágenes de una utopía de los consumidores de Iphones y centros de entretenimiento en el hogar. El sueño americano se ha convertido para ellos en una pesadilla.
Ellos han resucitado muchos de los símbolos y las imágenes de la contracultura de 1960 y movimiento de protesta. Esto es evidente para cualquier visitante a Zuccotti Park, que tiene la edad suficiente para recordar la estética de los hippies y las consignas de los radicales de la década de 1960. Este endeudamiento con las imágenes de otra época era prácticamente inevitable, dado que la década de 1960 representó el último período de gran agitación política en este país. Sin embargo, este es un movimiento muy diferente a la contracultura de 1960. No está tanto para protestar por la injusticia que nuestro país inflige a los demás en el extranjero - aunque esto tampoco no está ausente, - pero su objetivo principal es la injusticia infligida a ellos y a sus amigos y familiares. No son los hijos e hijas de la clase media acomodada enajenados por la cultura de la banalidad burguesa. Son personas que no ven un futuro para sí mismos sin un cambio fundamental en la sociedad y que están dispuestos a poner sus vidas para que esto suceda.
El sábado pasado 700 de ellos fueron detenidos en el Puente de Brooklyn después de entrar en una trampa tendida por la policía de Nueva York. (En realidad, la policía los llevó en su marcha sobre el puente, no les dijo que estaban entrando en una zona de tráfico limitado, y luego cuando estaban a un 1 / 3 de camino sobre el puente vieron que estaban rodeados, atrapados por las redes y detenidos. ) Las detenciones masivas han hecho poco para amortiguar sus espíritus.
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Actualización:
Yo escribí las impresiones un par de días atrás, pero como la situación en Wall Street es muy dinámica y cambia todos los días ,quería añadir algunas reflexiones sobre los hechos hasta el día de hoy (06 de octubre).
La marcha de Foley Square en Miércoles, 05 de octubre, era enorme y llevó a gran número de trabajadores y estudiantes en apoyo de los manifestantes. Según algunas estimaciones, había una multitud de 20.000 o más. Como se predijo, la burocracia sindical salió y se quedó con los políticos del Partido Demócrata en un patético intento de canalizar la furia de los manifestantes de nuevo con el apoyo a Obama y el Partido Demócrata. Por lo que pude observar más tarde, esa noche una gran mayoría de los manifestantes no quiere saber nada de ella. Su actitud podría resumirse en una de las pancartas que vi en Zuccotti Park esa noche: "La guerra de clase por delante".
La debilidad de los manifestantes estuvo también en evidencia por la noche. Un grupo de anarquistas pronto anunciaron que iban a marchar a la famosa estatua del toro de Wall Street y paró el tráfico en el proceso. Varios cientos de jóvenes fueron por las estrechas calles del distrito financiero buscando el toro. Al menos muchos policías les siguieron. Cuando por fin llegamos al toro, que fue cerrada por barricadas de la policía por todos lados y varios agentes de policía fueron asignados a pie dentro de las barricadas y proteger el toro a toda costa, como si el destino de la civilización occidental dependía de ellos y su capacidad para proteger el toro de cualquier daño. Este fue sin duda uno de los episodios más divertidos del día. Después un par de los miembros más francos de la marcha del grupo fueron hacia el toro, se detuvo a los mismos, las medidas se agotaron y todo el mundo se dirigió a Zuccotti Park.
Sin embargo, esa misma tarde otro grupo de manifestantes demostró más notable ingenuidad que ha caracterizado a esta ocupación desde el principio. Un proyector situado en algún lugar en el Zuccotti Park (no pude encontrar la ubicación exacta) fue transmitido en la calle diagonal frente a un edificio alto que carecía de ventanas, una característica común a muchos edificios comerciales construidos durante los años 1960 y 1970 en Manhattan. Este artefacto convirtió la pared de este edificio en una pantalla perfecta para un anuncio gigante. ¿Cuáles fueron las palabras que brillaban en este improvisado cartel?
Romper la ley del valor
Abolir el capitalismo
Así que parece que el hombre más odiado y temido por la clase capitalista, cuyas teorías se pensaba que eran obsoletas y que nunca podría hacerse un lugar en el suelo anti-filosófico de América - Karl Marx - ha vuelto y tiene algo que decir a los jóvenes y los trabajadores de este país. No quiero hacer más de este incidente que se justifica. Todavía hay un largo camino por recorrer en el camino de repetir algunas palabras de Marx en la asimilación de todas las implicaciones de su trabajo. Pero sí existe una indicación de que hay talvez ahora una receptividad a las ideas de este hombre, más que en cualquier momento de nuestra historia reciente. La calidad irónica de este desarrollo sólo puede ser apreciada si se considera la reacción a los acontecimientos de Wall Street de algunos de nuestros blogeros radicales, un tema que va a llegar a la brevedad.
Estamos en solidaridad con los manifestantes Ocupar Wall Street. Su espíritu y la creatividad es digna de admiración y compartan sus objetivos. Pero nosotros no nuestra responsabilidad como revolucionarios marxistas y si no les advierte de los peligros de ignorar la lucha política y la historia y la herencia teórica de quienes los precedieron en la lucha por el socialismo. Tomo nota de que una serie de bloggers radicales han tomado exactamente el camino opuesto. Ellos están cayendo sobre sí mismos con las palabras de adulación a los manifestantes y condenar a cualquiera que introduce aún más suave, con buenas intenciones críticas. Por ejemplo, un blogger radical lanzó una fuerte crítica de la ISO para la simple mención de que los manifestantes tienen algunas lecciones que aprender. Él escribió:
"... Hay una desconexión real entre los jóvenes activistas que buscan el cambio social fundamental, y grupos como el ISO que se consideran de alguna manera mejor calificado para dirigir esas luchas, ya que han logrado algún tipo de conocimiento superior del marxismo, o porque son conscientemente siguiendo el ejemplo de Lenin o Trotsky en lugar de los experimentos de tropiezo y tentativas de los jóvenes en el parque de la libertad. "
Aunque no creo que la ISO será capaz de educar a este movimiento, sin duda piensan que pueden utilizar la educación y el análisis de Marx sobre la crisis del capitalismo y la asimilación de la obra de Lenin y Trotsky, es por lo menos un comienzo. La demagogia en el comentario de este blogero consiste en la contraposición de una educación en la historia y la teoría del marxismo a la creatividad natural y la espontaneidad del movimiento de masas. Pero esto es un razonamiento falaz. Esperamos que, incluso con una educación en el marxismo, la revolución tendrá que enfrentarse a tropiezos y errores y de sus participantes a aprender de sus experiencias. Pero no todos los errores son necesarios y no todos los tropiezos tienen un efecto saludable en sus participantes. A veces, errores tienen consecuencias desastrosas. Los que van en una situación de ciegos y privados de la teoría o la historia inevitablemente se quedan en el camino a pesar de su valor y la inventiva. Esta ha sido la experiencia de todas las revoluciones anteriores y no esperamos que sea diferente en el siglo 21.
La cuestión clave es cómo llegar a estas personas. No va a ser realizada por aquellos que dicen ser marxistas, conferencias por personas que les dicen que "debe" unirse o leer este sitio web. Tales esfuerzos causan risa teniendo en cuenta el reproche que merecen correctamente.
Aquí están algunas ideas para los manifestantes a considerar:
1. "Socialismo para los ricos, capitalismo para los pobres" - es una forma muy popular de caracterizar el rescate de Wall Street por BushObama mientras que a decenas de millones de trabajadores y la clase media se han ejecutado la hipotec,por pérdida de empleos o no pueden encontrar trabajo. Sin embargo, hace que te preguntes: si el socialismo es bueno para los ricos, ¿por qué no se da para todo el mundo?
2.Ustedes necesitan saber a dónde van, si alguna vez va a llegar. Movimientos sin una meta no tienen una dirección, y se convierten en fácil presa para desviar o cooptar.
3."No creer en alguien que te dice que el sistema puede ser fijo y los políticos pueden ser presionados para hacer lo correcto. Nada es más peligroso que una crisis de ilusión. Lea lo que dice Wall Street y usted pronto verá que en el mejor de los casos es de hay un escenario para una década de depresión económica y austeridad, asumiendo que no hay un crack en toda regla. ¡Una década! Para los jóvenes esto significa ser condenados a una vida arruinada - para no tener la oportunidad de una carrera, un trabajo estable, un lugar decente para vivir. No tenemos ningún interés en este sistema. No tenemos nada que perder - y todo para ganar - por deshacernos de él.
4.No crean en los que tienen interés en el sistema, especialmente los políticos demócratas y líderes empresariales de los sindicatos. Las únicas personas en las que podemos confiar son los que se encuentran en el mismo lado de la brecha económica como nosotros mismos - la clase obrera.
5. Tenemos que estar organizados. Nuestros enemigos lo están. La Organización no es enemiga de la democracia. Por el contrario, la democracia sin organización significa que la energía del movimiento se disipa, reducida a un mínimo común denominador. Esto significa que el movimiento nunca se plantea un serio desafío para el sistema, nunca van a más allá de ser un espectáculo político.
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Ellos han resucitado muchos de los símbolos y las imágenes de la contracultura de 1960 y movimiento de protesta. Esto es evidente para cualquier visitante a Zuccotti Park, que tiene la edad suficiente para recordar la estética de los hippies y las consignas de los radicales de la década de 1960. Este endeudamiento con las imágenes de otra época era prácticamente inevitable, dado que la década de 1960 representó el último período de gran agitación política en este país. Sin embargo, este es un movimiento muy diferente a la contracultura de 1960. No está tanto para protestar por la injusticia que nuestro país inflige a los demás en el extranjero - aunque esto tampoco no está ausente, - pero su objetivo principal es la injusticia infligida a ellos y a sus amigos y familiares. No son los hijos e hijas de la clase media acomodada enajenados por la cultura de la banalidad burguesa. Son personas que no ven un futuro para sí mismos sin un cambio fundamental en la sociedad y que están dispuestos a poner sus vidas para que esto suceda.
El sábado pasado 700 de ellos fueron detenidos en el Puente de Brooklyn después de entrar en una trampa tendida por la policía de Nueva York. (En realidad, la policía los llevó en su marcha sobre el puente, no les dijo que estaban entrando en una zona de tráfico limitado, y luego cuando estaban a un 1 / 3 de camino sobre el puente vieron que estaban rodeados, atrapados por las redes y detenidos. ) Las detenciones masivas han hecho poco para amortiguar sus espíritus.
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Actualización:
Yo escribí las impresiones un par de días atrás, pero como la situación en Wall Street es muy dinámica y cambia todos los días ,quería añadir algunas reflexiones sobre los hechos hasta el día de hoy (06 de octubre).
La marcha de Foley Square en Miércoles, 05 de octubre, era enorme y llevó a gran número de trabajadores y estudiantes en apoyo de los manifestantes. Según algunas estimaciones, había una multitud de 20.000 o más. Como se predijo, la burocracia sindical salió y se quedó con los políticos del Partido Demócrata en un patético intento de canalizar la furia de los manifestantes de nuevo con el apoyo a Obama y el Partido Demócrata. Por lo que pude observar más tarde, esa noche una gran mayoría de los manifestantes no quiere saber nada de ella. Su actitud podría resumirse en una de las pancartas que vi en Zuccotti Park esa noche: "La guerra de clase por delante".
La debilidad de los manifestantes estuvo también en evidencia por la noche. Un grupo de anarquistas pronto anunciaron que iban a marchar a la famosa estatua del toro de Wall Street y paró el tráfico en el proceso. Varios cientos de jóvenes fueron por las estrechas calles del distrito financiero buscando el toro. Al menos muchos policías les siguieron. Cuando por fin llegamos al toro, que fue cerrada por barricadas de la policía por todos lados y varios agentes de policía fueron asignados a pie dentro de las barricadas y proteger el toro a toda costa, como si el destino de la civilización occidental dependía de ellos y su capacidad para proteger el toro de cualquier daño. Este fue sin duda uno de los episodios más divertidos del día. Después un par de los miembros más francos de la marcha del grupo fueron hacia el toro, se detuvo a los mismos, las medidas se agotaron y todo el mundo se dirigió a Zuccotti Park.
Sin embargo, esa misma tarde otro grupo de manifestantes demostró más notable ingenuidad que ha caracterizado a esta ocupación desde el principio. Un proyector situado en algún lugar en el Zuccotti Park (no pude encontrar la ubicación exacta) fue transmitido en la calle diagonal frente a un edificio alto que carecía de ventanas, una característica común a muchos edificios comerciales construidos durante los años 1960 y 1970 en Manhattan. Este artefacto convirtió la pared de este edificio en una pantalla perfecta para un anuncio gigante. ¿Cuáles fueron las palabras que brillaban en este improvisado cartel?
Romper la ley del valor
Abolir el capitalismo
Así que parece que el hombre más odiado y temido por la clase capitalista, cuyas teorías se pensaba que eran obsoletas y que nunca podría hacerse un lugar en el suelo anti-filosófico de América - Karl Marx - ha vuelto y tiene algo que decir a los jóvenes y los trabajadores de este país. No quiero hacer más de este incidente que se justifica. Todavía hay un largo camino por recorrer en el camino de repetir algunas palabras de Marx en la asimilación de todas las implicaciones de su trabajo. Pero sí existe una indicación de que hay talvez ahora una receptividad a las ideas de este hombre, más que en cualquier momento de nuestra historia reciente. La calidad irónica de este desarrollo sólo puede ser apreciada si se considera la reacción a los acontecimientos de Wall Street de algunos de nuestros blogeros radicales, un tema que va a llegar a la brevedad.
Estamos en solidaridad con los manifestantes Ocupar Wall Street. Su espíritu y la creatividad es digna de admiración y compartan sus objetivos. Pero nosotros no nuestra responsabilidad como revolucionarios marxistas y si no les advierte de los peligros de ignorar la lucha política y la historia y la herencia teórica de quienes los precedieron en la lucha por el socialismo. Tomo nota de que una serie de bloggers radicales han tomado exactamente el camino opuesto. Ellos están cayendo sobre sí mismos con las palabras de adulación a los manifestantes y condenar a cualquiera que introduce aún más suave, con buenas intenciones críticas. Por ejemplo, un blogger radical lanzó una fuerte crítica de la ISO para la simple mención de que los manifestantes tienen algunas lecciones que aprender. Él escribió:
"... Hay una desconexión real entre los jóvenes activistas que buscan el cambio social fundamental, y grupos como el ISO que se consideran de alguna manera mejor calificado para dirigir esas luchas, ya que han logrado algún tipo de conocimiento superior del marxismo, o porque son conscientemente siguiendo el ejemplo de Lenin o Trotsky en lugar de los experimentos de tropiezo y tentativas de los jóvenes en el parque de la libertad. "
Aunque no creo que la ISO será capaz de educar a este movimiento, sin duda piensan que pueden utilizar la educación y el análisis de Marx sobre la crisis del capitalismo y la asimilación de la obra de Lenin y Trotsky, es por lo menos un comienzo. La demagogia en el comentario de este blogero consiste en la contraposición de una educación en la historia y la teoría del marxismo a la creatividad natural y la espontaneidad del movimiento de masas. Pero esto es un razonamiento falaz. Esperamos que, incluso con una educación en el marxismo, la revolución tendrá que enfrentarse a tropiezos y errores y de sus participantes a aprender de sus experiencias. Pero no todos los errores son necesarios y no todos los tropiezos tienen un efecto saludable en sus participantes. A veces, errores tienen consecuencias desastrosas. Los que van en una situación de ciegos y privados de la teoría o la historia inevitablemente se quedan en el camino a pesar de su valor y la inventiva. Esta ha sido la experiencia de todas las revoluciones anteriores y no esperamos que sea diferente en el siglo 21.
La cuestión clave es cómo llegar a estas personas. No va a ser realizada por aquellos que dicen ser marxistas, conferencias por personas que les dicen que "debe" unirse o leer este sitio web. Tales esfuerzos causan risa teniendo en cuenta el reproche que merecen correctamente.
Aquí están algunas ideas para los manifestantes a considerar:
1. "Socialismo para los ricos, capitalismo para los pobres" - es una forma muy popular de caracterizar el rescate de Wall Street por BushObama mientras que a decenas de millones de trabajadores y la clase media se han ejecutado la hipotec,por pérdida de empleos o no pueden encontrar trabajo. Sin embargo, hace que te preguntes: si el socialismo es bueno para los ricos, ¿por qué no se da para todo el mundo?
2.Ustedes necesitan saber a dónde van, si alguna vez va a llegar. Movimientos sin una meta no tienen una dirección, y se convierten en fácil presa para desviar o cooptar.
3."No creer en alguien que te dice que el sistema puede ser fijo y los políticos pueden ser presionados para hacer lo correcto. Nada es más peligroso que una crisis de ilusión. Lea lo que dice Wall Street y usted pronto verá que en el mejor de los casos es de hay un escenario para una década de depresión económica y austeridad, asumiendo que no hay un crack en toda regla. ¡Una década! Para los jóvenes esto significa ser condenados a una vida arruinada - para no tener la oportunidad de una carrera, un trabajo estable, un lugar decente para vivir. No tenemos ningún interés en este sistema. No tenemos nada que perder - y todo para ganar - por deshacernos de él.
4.No crean en los que tienen interés en el sistema, especialmente los políticos demócratas y líderes empresariales de los sindicatos. Las únicas personas en las que podemos confiar son los que se encuentran en el mismo lado de la brecha económica como nosotros mismos - la clase obrera.
5. Tenemos que estar organizados. Nuestros enemigos lo están. La Organización no es enemiga de la democracia. Por el contrario, la democracia sin organización significa que la energía del movimiento se disipa, reducida a un mínimo común denominador. Esto significa que el movimiento nunca se plantea un serio desafío para el sistema, nunca van a más allá de ser un espectáculo político.
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